El estadounidense deja la IndyCar tras siete temporadas completas con Andretti Global, donde consiguió nueve victorias y se convirtió en el ganador más joven de la serie. Ahora se centrará en adquirir la experiencia necesaria para obtener la Superlicencia de la FIA, necesaria para conseguir un asiento en la F1.

Para lograrlo, Herta disputará una temporada en la Fórmula 2 el año que viene, mientras compagina sus carreras con el trabajo de desarrollo para Cadillac. Correr en Europa le proporcionará un valioso kilometraje en circuitos que aparecen en la F1, así como una primera oportunidad para adaptarse a los neumáticos Pirelli.

Herta describió el fichaje como un "paso de ensueño" en su carrera, subrayando que su ambición siempre ha sido competir en la Fórmula 1. Por su parte, Cadillac confiará en sus probados ganadores Valtteri Bottas y Sergio Pérez para su campaña de debut, con Herta apoyando el desarrollo del proyecto.

El director del equipo, Graeme Lowdon, elogió la madurez y velocidad de Herta, mientras que los estrechos lazos de Cadillac con la organización Andretti han jugado un papel importante en su incorporación. La decisión supone un audaz cambio de dirección para Herta, pero espera que finalmente le allane el camino hacia un puesto a tiempo completo en la parrilla de la F1.