Hasta ahora, ha sido una temporada dura para Yamaha, pero Fabio Quartararo sigue brillando a pesar de las dificultades. Quartararo ha logrado terminar entre los 10 primeros en ocho de sus últimas nueve carreras, lo que podría tomarse como una señal de que su determinación continúa, incluso cuando los resultados no siempre han mostrado su verdadera velocidad.

Después de todo, hay esperanza en el horizonte de Yamaha. Su esperado motor V4 promete más potencia y el posible fin de su larga desventaja en velocidad. Para un equipo acostumbrado a luchar por las victorias, podría ser el salvavidas que necesitan desesperadamente. Sin embargo, tras las pruebas y su estreno durante un fin de semana no hace mucho, el motor no rindió tan bien como se esperaba.

Quartararo parece que acabará noveno en la clasificación de MotoGP, su mejor resultado desde 2022, cuando terminó la temporada como subcampeón por detrás de Francesco Bagnaia. Incluso estuvo cerca de la victoria este año, especialmente en Silverstone, donde se vio cruelmente perjudicado por un fallo en el dispositivo de altura de pilotaje. El segundo puesto sigue siendo su mejor resultado de la temporada, pero todo el mundo sabe que merece más.

Las cosas dieron un giro frustrante en Indonesia, donde Quartararo tuvo dificultades para entender sus problemas de ritmo. El neumático especial Michelin utilizado para esa carrera le dejó desconcertado, y ha admitido que el desarrollo de Yamaha parece ir por detrás de sus rivales, una señal preocupante, especialmente con el nuevo reglamento que llegará en 2027.

A pesar de los retos, la lealtad de Quartararo a Yamaha es notable. Muchos le han instado a unirse a Ducati, pero él se ha mantenido al lado del equipo que le dio su primera oportunidad en MotoGP. Se niega a abandonar un proyecto al que ha dado tanto de sí mismo. Pero la paciencia tiene un límite.

La periodista española Mela Chércoles asegura que Quartararo pasa noches en vela pensando en su futuro. Según reveló a AS:

"¿Sabes quién tiene ya pesadillas por la noche y le cuesta conciliar el sueño? Fabio Quartararo". Quartararo todavía no sabe lo que va a hacer. Quiere a la gente con la que está, pero necesita que Yamaha le dé una moto competitiva. Si no, tengo muy claro que esta vez va a anteponer las prioridades deportivas y económicas."

Esta frase resume perfectamente el dilema de Quartararo. En términos más sencillos, el corazón dice que se quede, pero la cabeza sabe que el tiempo se acaba. Está en el mejor momento de su carrera y, sin embargo, a menudo se encuentra luchando en el centro del campo en lugar de en la delantera.

Aun así, hay motivos para la esperanza. Las próximas carreras podrían suponer un balón de oxígeno. Después de Phillip Island, MotoGP regresa a Malasia, una pista en la que Yamaha impresionó durante los entrenamientos de pretemporada. El trazado juega a favor de la moto, y Quartararo sabe que podría ser una de sus últimas oportunidades para conseguir una victoria largamente esperada.

Con Marc Márquez descartado para la próxima carrera, la oportunidad no podría ser más clara. Han pasado tres años y medio desde la última vez que Quartararo subió a lo más alto del podio, y otra victoria significaría algo más que puntos, levantaría la moral de todo el equipo.

Tanto si se trata de su última victoria con Yamaha como si es el inicio de un regreso, una cosa está clara: Fabio Quartararo aún no ha terminado de luchar.