Horner fue destituido de su cargo de director de equipo y consejero delegado el 9 de julio, poco después del Gran Premio de Gran Bretaña en Silverstone, que fue su última carrera en el muro de boxes con el equipo. Durante unas semanas siguió siendo empleado oficial, pero ahora se ha confirmado su marcha tras un acuerdo privado con la empresa.

Durante su liderazgo, Horner guió a Red Bull a una era de éxitos extraordinarios, ganando ocho campeonatos de pilotos, cuatro con Sebastian Vettel y cuatro con Max Verstappen, así como seis títulos de constructores. El equipo también logró 124 victorias en carreras, 287 podios y 107 poles, lo que convierte a Horner en uno de los jefes de equipo más exitosos de la historia de la Fórmula 1.

LEER MÁS: Christian Horner dice que su marcha de Red Bull "fue un shock

Los medios de comunicación sugieren que el acuerdo de salida de Horner podría rondar los 60 millones de euros, aunque esto no ha sido confirmado oficialmente. Otras fuentes afirman que el acuerdo podría oscilar entre los 70 y los 100 millones de dólares estadounidenses, mientras que su contrato original tenía vigencia hasta 2030.

Horner también ha sido destituido de otros altos cargos de Red Bull en el Reino Unido, incluyendo Red Bull Powertrains, que está construyendo los nuevos motores del equipo para 2026, y Red Bull Applied Technologies, la división de ingeniería avanzada de la compañía. Su marcha se produce tras meses de desacuerdos y luchas de poder en la cúpula del equipo.