Ganador: Francesco Bagnaia

Aunque no terminó la carrera, Bagnaia recordó a todos su habilidad y determinación. Realizó una vuelta brillante en la sesión clasificatoria para hacerse con la pole position, demostrando que todavía sabe cómo extraer la velocidad de su Ducati incluso cuando la moto no se adapta perfectamente a él. En el sprint, pilotó con fuerza y se mantuvo en cabeza. El domingo se mantuvo cerca de la cabeza hasta que un pinchazo en el neumático trasero en la vuelta 12 le obligó a retirarse. Fue mala suerte, porque hasta ese momento parecía capaz de luchar por el podio. A pesar del resultado, Bagnaia y su equipo salieron de Malasia con un mejor conocimiento de la moto y de cómo manejar su impredecible comportamiento.

Perdedor: Aprilia

Tras sus buenas carreras en Indonesia y Australia, Aprilia llegaba a Sepang como una auténtica aspirante. Pero el fin de semana se convirtió en uno de los más duros del año. El equipo tuvo problemas para encontrar agarre desde la primera sesión y no consiguió meter ni una sola moto en la Q2. Los cambios de temperatura en la pista y la lluvia ligera dificultaron aún más la puesta a punto, y la carrera se celebró antes de lo habitual, lo que significó que había menos goma en el circuito. Marco Bezzecchi eligió el neumático medio con la esperanza de que durara más, pero el repentino aumento de la temperatura el domingo arruinó ese plan. Su mejor resultado fue el de Ai Ogura, décimo, a casi veinte segundos de Márquez. Raúl Fernández, el ganador en Australia, se cayó durante la carrera, empeorando las cosas. El fin de semana demostró que Aprilia aún tiene trabajo por hacer antes de poder luchar con Ducati en todas partes.

Ganador: KTM

La mayoría de la gente pensaba que el Gran Premio de Malasia sería un desastre para KTM. Se esperaba que las condiciones de calor y el elevado desgaste de los neumáticos destruyeran su ritmo durante toda la carrera. Sin embargo, el equipo sorprendió a todos. Pedro Acosta gestionó brillantemente sus neumáticos blandos y se mantuvo cerca de Bagnaia durante las primeras vueltas. Cuando el ritmo de Bagnaia bajó a causa del pinchazo, Acosta se colocó segundo y lo mantuvo hasta la meta. La decisión de KTM de eliminar algunos de los controles electrónicos de la moto ayudó a Acosta a gestionar sus neumáticos por sensaciones, lo que se adaptaba a su estilo de pilotaje. Otros pilotos de KTM también rindieron mejor de lo esperado. Tanto Brad Binder como Enea Bastianini han remontado posiciones y han terminado entre los 10 primeros después de salir muy atrás.

Perdedor: El proyecto V4 de Yamaha

Yamaha volvió a llevar su nuevo prototipo V4 a Malasia para realizar otro test, pero los resultados fueron decepcionantes. El equipo hizo funcionar el motor en un modo seguro, de baja potencia, para evitar problemas de fiabilidad, lo que significó que la moto carecía de velocidad en la larga recta de Sepang. El piloto probador Augusto Fernández dijo que la moto era difícil de controlar y no tenía la potencia necesaria para competir adecuadamente. Aunque el objetivo del test era recopilar datos y no perseguir tiempos por vuelta, demostró que Yamaha tiene un largo camino por recorrer antes de que la V4 esté lista para competir.

Ganador: Álex Márquez

Álex llegó a Malasia lleno de confianza y pilotando una de las mejores motos que ha tenido nunca en MotoGP. Después de asegurarse el segundo puesto en el campeonato el sábado, por fin estaba libre de presión. Esa libertad le permitió pilotar con su agresividad y confianza naturales. Cuando empezó la carrera, perdió brevemente una posición con Pedro Acosta, pero rápidamente remontó y adelantó a Francesco Bagnaia en la segunda vuelta para ponerse en cabeza. A partir de ese momento, gestionó cuidadosamente sus neumáticos y controló el ritmo de la carrera, sin dejar que nadie volviera a acercarse. Su pilotaje tranquilo e inteligente demostró lo mucho que ha crecido como piloto.

Perdedor: Fermín Aldeguer

Aldeguer ganó el título de Novato del Año en Malasia, pero el fin de semana no fue como esperaba. Sus problemas comenzaron en los entrenamientos, donde un drama de última hora le impidió acceder directamente a la Q2. Luego se estrelló en la Q1 e incluso tuvo una pequeña colisión en el pit lane mientras volvía corriendo al garaje. En la carrera al sprint, demostró una buena velocidad y cruzó la meta en tercera posición, pero una penalización por la presión de los neumáticos le relegó a la séptima plaza. El domingo, las cosas no mejoraron. Le costó encontrar su ritmo, se mantuvo en la parte baja del top 10 y más tarde se estrelló a falta de cinco vueltas.