La larga disputa entre McLaren y el piloto de IndyCar Alex Palou ha llegado esta semana al Tribunal Superior del Reino Unido. El equipo con sede en Woking demanda a Palou por más de 20 millones de dólares, alegando que rompió su contrato con ellos.

El conflicto se remonta a julio de 2022, cuando tanto Chip Ganassi Racing (CGR) como McLaren anunciaron que Palou correría para ellos la siguiente temporada de IndyCar. Tras meses de idas y venidas, se llegó a un acuerdo: Palou permanecería con Chip Ganassi en 2023, al tiempo que trabajaría como piloto de pruebas y desarrollo para el equipo de Fórmula 1 de McLaren. En virtud de ese acuerdo, debía unirse al equipo IndyCar de McLaren en 2024.

Sin embargo, Palou decidió más tarde quedarse con Ganassi, alegando que había perdido la confianza en la capacidad de McLaren para asegurarle un asiento en la Fórmula 1.

A medida que el caso se desarrollaba en los tribunales esta semana, ambas partes compartieron nuevos detalles sobre lo que llevó a su ruptura. Palou afirmó que el jefe de McLaren, Zak Brown, le había dado esperanzas de un futuro en la F1, diciendo al tribunal que Brown había dicho que "haría que sucediera" y le daría toda la preparación necesaria para un asiento.

Pero Brown ha negado haber prometido nada concreto a Palou, afirmando que sólo habló de posibles oportunidades. Cuando los abogados de Palou le acusaron de dar largas al español, Brown insistió: "Nunca le dije que estaría en consideración para 2023. Había cierta opcionalidad para unirse a la F1".

Palou también describió su reacción cuando McLaren fichó a Óscar Piastri para sustituir a Daniel Ricciardo en la temporada 2023. Dijo que estaba "molesto, preocupado y enfadado" porque otro novato había sido elegido en su lugar, y que a pesar de las garantías de McLaren, comenzó a dudar de que un asiento en la F1 fuera realista.

Palou continuó revelando que había estado en conversaciones con AlphaTauri sobre un posible piloto de Fórmula 1 para 2024, pero afirmó que el interés se desvaneció después de una conversación entre el asesor de Red Bull Helmut Marko y Zak Brown.

Mientras tanto, el equipo legal de McLaren ha acusado a Palou de causar importantes daños financieros y de reputación al abandonar su acuerdo. El abogado de McLaren, Paul Goulding, declaró ante el tribunal que el equipo se vio "sumido en una crisis" tras la decisión de Palou, afirmando que los patrocinadores retuvieron los pagos y que el equipo tuvo que luchar para encontrar un piloto sustituto.

Los abogados de Palou, sin embargo, calificaron las afirmaciones de McLaren de "enormemente exageradas" y calificaron la demanda de "intento descarado de llevar al Sr. Palou a la ruina".